La vida puede ser maravillosa, Salinas!

Me gusta el fútbol. Los domingos por la tarde es la mayor de mis aficiones. Y este mes de este año hay quien se sorprende de que (sí, tengo algo de tiempo, ya véis) me trague un Corea-Togo tratando de quedarme con algún nombre de jugador, imitando a algún periodista de esos que saben tanto de la tercera división de Guinea Bissau y que no tienen novia.
Así que el mundial, amigos, me tiene más que entretenido y por una vez (chico, que alivio) ilusionado. Y eso que la ilusión, como su nombre indica, es engañosa y nunca esconde lo que muestra. Y claro, todo eso es cierto: Ucrania, te pongas como te pongas, son cuatro amigos; y jugaron un buen rato con diez; y el penalti no fue; y los goles a balón parado...pero qué coño! la ilusión es una buena medicina para el alma. Todos sabemos que detrás de los trucos de los magos (ilusionistas) hay eso, truco, y ponemos cara de escepticismo. Pero todos, sí, tú también, nos preguntamos como lo harán. Así que disfrutemos de momento y volvamos a cortar la baraja.
Mañana estamos en Sevilla y el verano empieza a ponérsenos delante como un jugoso meloncito. Conocéis las buenas noticias y las malas nunca importan. Aunque no tengamos edad os propongo un sueñecito más...abrazos y besos...
P.D. Atención pregunta: ¿Por qué cuando ponen videos sensibleros de futbol o colecciones de goles, las televisiones eligen siempre una canción de Coldplay para acompañar las imágenes?.